Enorme victoria del Intersala ante un gran Eixample
Un gran espectáculo de fútbol sala depararon el Intesala Las Palomas, quinto clasificado, y el Mecanoviga Eixample, que ocupaba la segunda posición, el pasado sábado en el pabellón de La Granja al centenar de aficionados que se acercaron a una hora nada habitual, las cuatro de la tarde. Seguro que todos los espectadores salieron satisfechos en un partido jugado a todo ritmo, con jugadoras exhaustas en la pista pero aún así luchando hasta el último segundo por ganar la posición y disputar el balón. La victoria cayó del bando local por su mayor acierto en apenas cinco minutos de locura en la segunda parte, en los que logró dar la vuelta al resultado, pero las catalanas nunca se dieron por vencidas.
El encuentro se planteó desde el principio como una tremenda lucha por la posesión de la pelota. Las jugadoras del Eixample necesitaban la victoria para seguir optando al play off de ascenso a primera división y querían mantener el control del partido, salir jugando desde su área, con una presión defensivo muy alta. El Intersala optaba por dar mayor viveza a sus ataques, con transiciones rápidas por las bandas, y encontraba muchos espacios por detrás de la adelantada línea defensiva del Eixample. Las catalanas notaban la presión y no lograban dar sensación de superioridad, a pesar de su mejor clasificación.
El Intersala gozó de las mejores ocasiones en las botas de Lucía Vicente, tras una gran combinación por la zona izquierda su remate dentro del área se fue al palo. María Barcelona dispuso de dos oportunidades claras de gol casi seguidas, en una jugada en el que el equipo local remató hasta cuatro veces en buenas posiciones pero en todas ellas la defensa y la portera visitante taparon los espacios.
El Eixample nunca renunció al ataque y también hizo trabajar a Carolina, que defendía la portería del Intersala, con disparos desde la zona de diez metros y dos rápidas llegadas en superioridad que atajó con solvencia la portera zaragozana.
Al descanso se llegó con empate a cero y la sensación de que el Intersala había fallado más de lo permitido.
En la segunda parte las visitantes salieron decididas a decantar el partido de su lado. Redoblaron su presión defensiva y no dejaban maniobrar con el balón a las chicas del Intersala. En el primer minuto dispusieron de la primera ocasión, que desbarató Izarbe, que ahora ocupaba la portería intersalista. Las locales no conseguían salir de la presión y las del Eixample recuperaban el balón cada vez más deprisa y más cerca de la portería zaragozana.
Fruto de esa presión fue el primer gol del partido, tras un robo en la zona central de la pista una rápida combinación por la zona izquierda y un centro al segundo palo dónde una jugadora sola empuja el balón a la red.
El gol espoleó todavía más a las catalanas que buscaban con ahínco el segundo tanto que decantara el partido. Seguían con la presión muy alta, sin dar opción a las zaragozanas de controlar la pelota fuera de su línea defensiva. Tuvieron varias ocasiones para alcanzar ese segundo gol pero Izarbe detuvo dos buenas llegadas en superioridad e incluso en una jugada similar a la del gol, el remate arrastrando salió fuera por muy poco.
Cuando peor lo estaba pasando el Intersala, en una jugada de rabia y brío de Paula Perez por la zona izquierda del ataque supera a dos defensas catalanas y ante la salida de la portera la bate con un disparo raso y cruzado.
Las jugadoras del Eixample no se esperaban esa reacción. Las del Intersala, espoleadas por el gol subieron la línea de presión y ya no dejaban salir con facilidad a las catalanas. Era una lucha cerrada por cada balón. De esta forma, Marta Alónso consigue frenar el regate de una contraria, se lleva la pelota que le queda al borde del área en la zona derecha del ataque y con un potente disparo pegado al palo consigue el segundo gol, apenas dos minutos después del empate. Las locales daban la vuelta al marcador y a las sensaciones del partido.
El juego seguía siendo una lucha sin cuartel pero ahora eran las locales las que salían victoriosas en casi todos los choques. Así, Sheila recupera una pelota dividida en el centro del campo, se lleva por fuerza el balón ante la defensa rival y vuelve a marcar de tiro raso ante la salida de la portera catalana. Era el 3 a 1, que ponía el partido muy de cara para las locales.
El Eixample no se daba por vencido, necesitaba la victoria, y optaba por el juego de cinco cuando todavía faltaban cinco minutos para el final. Sin embargo, las jugadoras locales hicieron gala de un gran derroche físico y apenas dejaron huecos a las catalanas que no pudieron sacar provecho de su estrategia y no dispusieron de ocasiones claras de gol.
Al final el Intersala consiguió una victoria merecida, de mucho mérito, ante uno de los mejores equipos de la categoría, gracias al gran espíritu de lucha y a la enorme calidad individual de sus jóvenes jugadoras.
Información y Fotos: Departamento de Prensa Intersala